Publicación: 10-04-2024
Autoría: Omar Pacheco
La Juntanza Zuque-Fucha y la comunidad de la localidad de San Cristóbal no reconocen voluntad política por parte de la administración Galán para que las construcciones a cargo de la Secretaría de Ambiente (SDA), que hacen parte del proceso de recuperación de El Zuque, se ajusten al plan de manejo ambiental de los cerros orientales y por lo tanto cumplan las condiciones para proteger el ecosistema de páramo.
La Juntanza Zuque-Fucha y la comunidad de la localidad de San Cristóbal convocaron una reunión el 27 de febrero de este año con el fin de hacer conocer la posición de la nueva administración al respecto del futuro de las construcciones en El Zuque. El encuentro se llevó a cabo en las instalaciones de la SDA y asistieron funcionarios del ministerio y la secretaría de ambiente, la personería delegada para asuntos ambientales y representación del Concejo de Bogotá. Sin embargo, faltó la representación de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), autoridad ambiental competente de las obras.
Los resultados de esta reunión fueron desalentadores para las organizaciones y la comunidad. “Lo que nos dice la persona encargada de ejecutar estas obras es que se está buscando que continúen tal y como estaban previstas a pesar de que hay unas medidas preventivas ordenadas por la CAR y el Ministerio de Ambiente” menciona Felipe Torres, abogado del Comité Popular de Derechos Humanos del Suroriente y miembro de la Juntanza Zuque-Fucha.
Este medio intentó comunicarse con la oficina de comunicaciones de la entidad y no logramos una respuesta sobre su postura en relación a las obras que en este momento se encuentran detenidas en la serranía.
Lo que se podría concluir de la reunión, de acuerdo a los testimonios que se recogieron, es que a pesar que la comunidad y las colectividades que defienden los derechos de la Serranía del Zuque quieren que las obras se ajusten al Plan de Manejo Ambiental Reserva Forestal Protectora Bosque Oriental, la SDA está adelantando las acciones jurídicas para continuar las obras como estaban pensadas.
La recuperación de El Zuque, como fue denominado por la administración anterior, iniciaron en el 2022 y como parte de este proceso la Alcaldía de Claudia López, tras declarar la zona como parque de montaña, propuso emular los modelos del parque Mirador de los Nevados (Suba) y Soratama (Usaquén) que, según la SDA, se destacan por generar un espacio para la educación y sensibilización ambiental. Una vez contó con la aprobación de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), la administración pasada otorgó un poco más de $12 millones para la construcción de ocho aulas ambientales, cinco miradores miradores y una red de senderos con los cuales se esperaba entregar un espacio para la recreación pasiva de la comunidad.
Sin embargo, las obras adelantadas por la empresa Strycon S.A.S. han incurrido en varias irregularidades desde su inicio, generando inconformidades por parte de organizaciones ambientales y vecinos y vecinas del sector. Hasta el momento cuenta con dos medidas preventivas, una por parte de la CAR, por excederse en el endurecimiento del suelo y del Ministerio de Ambiente, porque en su consideración las obras cambian el uso del suelo y los objetivos de la Reserva Forestal Protectora Nacional Bosque Oriental de Bogotá
Por un lado, el proyecto no ha incluido ni informado suficiente a la comunidad, pues aunque la Secretaría de Ambiente le aseguró a El Espectador que hubo “19 actividades de socialización y participación, entre 2019 y el primer semestre de 2023, en las que participaron 129 representantes de la comunidad, 15 instituciones y siete colectivos”, para explicar el proyecto y se adjudicó el contrato”, en el Informe de avance de cumplimiento a diciembre de 2023 tan solo se mencionan una “actividad de socialización [de los estudios previos y anexos técnicos] con actores clave de la zona” el 3 de julio de 2019; y una reunión “de socialización del proyecto con la comunidad de la localidad de San Cristóbal” el 18 de febrero de 2023.
De otro lado, en la construcción de las aulas se han utilizado materiales que afectan negativamente el ecosistema de la Serranía de El Zuque, como: Columnas de perfiles metálicos de acero galvanizado, muros de mampostería estructural confinada por columnas, vigas en concreto reforzado, losas sobre las que se construirán todos los módulos y pilotes de concreto de 20 cm (Según el Informe Técnico DGOAT N0. 8 del 07 de enero de 2020 - Corporación Autónoma Regional Cundinamarca CAR), lo que ha llevado a organizaciones ambientales como el Comité de Derechos Humanos del Suroriente, Huertopia, Guakes del Zuke y en general a la confluencia Juntanza Zuque-Fucha, a adelantar acciones jurídicas para alertar sobre la negligencia de la CAR y otras instituciones.
De hecho, el abogado Felipe Torres señala: “está en curso una acción de tutela por medio de la cual le estamos solicitando al Consejo de Estado que le ordene al Tribunal Administrativo de Cundinamarca resolver la medida cautelar que le solicitamos en el mes de julio del año pasado para que detenga totalmente las obras en la Serranía del Zuque por el incumplimiento al plan de manejo ambiental de los cerros orientales”.
Las organizaciones exigen que las obras que se vayan a construir en la Serranía del Zuque estén ajustadas al plan de manejo ambiental de los cerros orientales, que la CAR nombre a la comunidad que ha estado defendiendo los derechos de El Zuque como terceros intervinientes, que se presente un informe sobre el estado actual de la obra y si la SDA venía acatando las solicitudes realizadas por la CAR frente a los incumplimientos en las obras.
Además de la suspensión de las obras por parte del Ministerio de Ambiente, las organizaciones defensoras de los derechos ambientales y las vecinas de la Serranía del Zuque decidieron realizar un cierre simbólico de las instalaciones.
En lo administrativo la Juntanza está solicitando por medio del Congreso de la República una mesa de trabajo con la CAR Cundinamarca, “ya que evidenciamos que la Secretaría de Ambiente no tiene voluntad de detener las obras como se contemplaron”. En dicha mesa se está solicitando que haga presencia el Ministerio de Ambiente, la Procuraduría, la Personería y la Veeduría.
Afirma Torres “aquí hay un incumplimiento de quien autoriza que es la CAR y de quien ejecuta la obra que es la Secretaría de Ambiente”. La comunidad considera que la CAR también infringió el plan de manejo ambiental al otorgarle una autorización al distrito de Bogotá de construir en materiales duros como cemento, varilla, concreto, ladrillo, ya que el plan de manejo de los cerros ambientales prohíbe construir con esos materiales en zona protegida.
“Encontramos una contradicción de parte de la CAR al permitir que se construya en unos materiales que no están permitidos” menciona el abogado Felipe Torres. Esta contradicción también se refleja en las solicitudes realizadas por esta autoridad a la SDA y a Strycon S.A.S., empresa encargada de las obras, entre las que se encuentran:
A pesar de las solicitudes realizadas por la CAR Cundinamarca las obras continuaron y como medida preventiva el Ministerio de Ambiente, atendiendo a las acciones jurídicas y administrativas de las organizaciones que componen la Juntanza Zuque-Fucha, decide suspender completamente las obras de la Secretaría de Ambiente en la Serranía del Zuque el pasado 20 de septiembre del 2023.
Para las organizaciones ambientales y para las vecinas de la localidad de San Cristóbal es fundamental conocer la posición que tiene la CAR como entidad encargada del área protegida.
“Hemos solicitado de diferentes maneras a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca que nos conceda una reunión como comunidades previa a expedir el sancionatorio, en la que nosotras podamos presentar y expresar nuestra voz respecto a lo que aún creemos que son inconsistencias que ninguna de las dos medias preventivas, ni mucho menos la CAR, han dado alcance” cuenta Iván Murcia, líder ambiental de la Colectiva Huertopía y miembro de la Juntanza Zuque-Fucha.
La reunión fue designada para el próximo jueves 11 de abril a las 3PM en la sede de la Corporación Autónoma Regional y en ella buscará, por un lado presentar las pruebas de la comunidad para que haya medidas sancionatorias contra la SDA, en el marco de la ley 1333 de 2009, y por otro, que la CAR nombre como tercero interviniente a la comunidad en las obras que se vayan a realizar en la Serranía del Zuque.
La Juntanza Zuque-Fucha y la comunidad de la localidad de San Cristóbal no reconocen voluntad política por parte de la administración Galán para que las construcciones a cargo de la Secretaría de Ambiente (SDA), que hacen parte del proceso de recuperación de El Zuque, se ajusten al plan de manejo ambiental de los cerros orientales y por lo tanto cumplan las condiciones para proteger el ecosistema de páramo.
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